TODA UNA VIDA DETRÁS DEL SOL
Yo apenas tenía 10 años cuando un día “El Sol” me
deslumbró.
Un día el destino quiso que estuviera viendo un programa
de televisión en España, “TOCATA”, creo recordar.
Sería el año 1984 y vi aparecer un cantante que vestía
con un traje gris y corbata, como un adulto pero era un niño.
Un niño que jugaba a ser un hombre, a seducir mientras
cantaba y tenía una cara angelical, unos ojos de un color claro que me
hipnotizaron y una melena rubia preciosa que no se dejaba de tocar.
De repente sentí que su voz y su cara iban a cambiar mi
vida, seguiría a ese niño de por vida, su nombre LUIS MIGUEL.
Mientras escribía esto he pensado, ¿a cuántas de nosotras
nos ha pasado igual, el quedarnos deslumbradas por esa imagen de Luis Miguel de
niño?
Yo también era una niña y desde entonces, desde que le
conociera cantando “Palabra de Honor”, desde que le viera aflojarse la corbata
y tocarse de esa forma su melena rubia… su cara y su voz me han acompañado
siempre.
De forma milagrosa un par de años más tarde encontré un
cassette , su primer cassette en una tienda de discos y al ver su foto algo
dentro de mí se encendió y dije, éste niño tan guapo , ¿no será el mismo de
“Palabra de Honor”?.
El corazón me decía que sí, que esa cara tenía que ser la
de ese niño que me había deslumbrado por la televisión, no podía ser que su
foto me hubiera hecho sentir lo mismo.
Me compré la cinta y me fui a casa con “ese pequeño tesoro Luismiguelero” entre mis manos.
Al escuchar sus canciones, su increíble voz me terminó de
hipnotizar.
Había visto muy pocas veces a Luis Miguel en la tele y
esa cinta se convirtió en mi única referencia de su música.
Poco después un amigo me regaló su segundo cassette “Directo al corazón”, así fue cómo llegó Luis
Miguel a mi vida.
En otra tienda muy conocida en mi ciudad encontré en
vinilo sus discos “Decídete” y “Palabra de honor”, ni tenía dinero ni
tocadiscos, así que me conformaba con pasar de vez en cuando y mirar los discos
con sus fotos. Durante unos minutos los contemplaba y me venía para casa con su
cara en mi memoria y deseando acudir algún día a un concierto suyo.
Pero eso era mucho para mí, apenas tenía unos 13, 14 años
y él 17. Era guapo, famoso y Mexicano… lo que para mí me parecía inaccesible.
Lo veía como en una nube, como EL SOL que te deslumbra y apenas puedes
admirarlo durante unos instantes.
Cuando vi el disco “Un Hombre busca a una mujer” de 1989,
al ver la portada no me pude contener y aún sin tener dónde escuchar el disco
me lo compré, pensaba en un futuro no muy lejano comprarme un equipo de música
con tocadiscos.
Esa portada era espectacular, el niño había crecido pero
su mirada y su cara me fascinaba aún más.
También encontré “ 20 Años” y con su preciosa cara a
tamaño gigante me lo tuve que comprar…
Llegó el momento de comprarme un equipo en condiciones y
ya no se llevaba lo de el tocadiscos, total que me lo compré con lector de CD y
apenas probé los vinilos en casa de una amiga un día, por eso de ver si se
escuchaba.
“Un Hombre busca a una mujer” y “20 Años” son los únicos
discos en vinilo que tengo y jamás he tenido tocadiscos.
Jaja… Locuras que se hacen por Luis Miguel!
Me los fui comprando en CD aunque tenía toda su
discografía en cassettes.
En España salía muy poco en televisión y en las revistas.
Cuando esto
ocurría yo estaba con el vídeo preparado para grabarle y dispuesta para bajar a
comprarme la revista en la que saliera él.
En las emisoras de radio tampoco se hablaba mucho de Luis
Miguel por eso cuando en el colegio y en el instituto yo decía que me gustaba
Luis Miguel muchos ni le conocían, o se burlaban de mí diciendo cualquier cosa
que sabían me haría enfadar.
Tal vez fue con el disco Romance en el 91 cuando se hizo
más popular y cada vez que decía que me gustaba Luis Miguel ya no tenía que
explicar quién era.
Pero me sentía como un bicho raro al que le gusta algo
que nadie conoce, tal vez por eso en 1990-91 me hizo mucha ilusión pertenecer a
un club de fans de Luis Miguel en Valladolid.
Me mandaron un carnet con mi número de socia y nos
mandaban fotos que yo guardaba como oro en paño en un álbum con especial
cariño.
Hice grandes amigas gracias al club y nos escribíamos y
nos mandábamos fotocopias de recortes y posters de nuestro querido Luis Miguel.
Rara era la semana que no tenía cartas en el buzón con
cosas de él.
Al menos así pude compartir mi gusto por su música con
gente que sentía lo mismo que yo.
Cuando Luis Miguel vino a España a La Expo de Sevilla en
1992 yo me quedé con unas ganas enormes de haberlo visto.
Recuerdo esa noche
que él cantaba encerrada en mi habitación tirada en la cama escuchando un
concierto suyo mientras imaginaba estar ahí, en La Expo.
Tuve que esperar hasta el año 1998 que vino de gira por
España para poder disfrutar de su presencia.
Conseguí entradas para Murcia y convencí a una amiga para
que viniera conmigo, recuerdo que se lo supliqué prácticamente… al final
también nos acompañó su novio y fuimos todo el viaje escuchando sus canciones
para ir preparando el ambiente.
Fue el 9 de Mayo de 1998, en la Plaza de Toros la vez que
pude estar por primera vez en el mismo recinto que él, respirar su mismo aire y
sobre todo disfrutar de su arte, su voz, su presencia, su elegancia, de todo lo
que implica Luis Miguel.
Fue un concierto INOLVIDABLE por ser la primera vez,
además de que la plaza de toros estaba a reventar y la gente nos entregamos al
máximo.
Recuerdo que durante varios minutos la plaza entera le
estuvimos aplaudiendo después de cantar “La Incondicional” entre otras
canciones.
Ese fin de semana de carretera, concierto y vuelta a la
carretera no lo olvidaré jamás.
Gracias a mis amigos cruzar España para ver a mi ídolo de
toda la vida se hizo más fácil y divertido.
Después en 1999 le volvería a ver más cerca de mi ciudad,
a apenas 1 hora de viaje, en Valladolid, en el campo de futbol “José Zorrilla”.
También le he visto en Madrid en la plaza de toros de Las
Ventas en el 2004 el 28 de Septiembre, en su Gira 33, con un lleno absoluto y
una luna llena impresionante que no quiso perderse disfrutar de “EL SOL”. Esa
noche fue mágica, “EL SOL” y La Luna coincidieron en un mismo lugar y la Luna
se dejó enamorar por la voz dulce y susurrante de “EL SOL”.
Cuando pensaba que jamás le podría ver más cerca que
Valladolid, en Enero del 2007 me entero que Luis Miguel vendría a mi ciudad,
Salamanca, en el mes de Mayo.
Era mi oportunidad para tener una primera fila, poder ver
de cerca sus preciosos ojos y mirarle cara a cara.
Y así fue, conseguí hacer realidad mi sueño, estar a
centímetros de él, poder “descifrar qué hay en sus ojos”, ver el color exacto
de sus pupilas, su piel morena y su sonrisa encantadora de frente.
Fue en su Tour 2007, el 11 de Mayo la vez que más cerca
he estado de él.
Casi pude oler su piel y aunque no consiguiera tocarle me
fue suficiente con mirarle a los ojos y ver su sonrisa en directo y tan de
cerca.
Desde el 2007 en España hemos tenido una sequía “Luismiguelera”
hasta el pasado 2012 que regresó de gira.
El año pasado, a finales de Abril me fui a Cáceres, y una
vez más fui al Paraíso de su mano, “De nuevo al paraíso con él”.
Otra noche para el recuerdo. Y ya van 5.
Tengo que decir que a excepción de Murcia, a las demás ciudades : Valladolid, Madrid y Cáceres, ha sido mi hermano el que me ha llevado en coche para ayudarme a hacer realidad mi sueño de ver a Luis Miguel.
Tengo que decir que a excepción de Murcia, a las demás ciudades : Valladolid, Madrid y Cáceres, ha sido mi hermano el que me ha llevado en coche para ayudarme a hacer realidad mi sueño de ver a Luis Miguel.
Y así, desde que un día entró en mi vida la voz de un
niño cantando “Palabra de Honor”, me dije: Te doy mi palabra de honor que te
voy a seguir.
Toda una vida detrás de “EL SOL”
LUIS MIGUEL, aquí una Incondicional desde Salamanca.
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